Bernardo Gui (1261-1331) fué un religioso dominico que desde bien temprano obtuvo diversos cargos inquisitoriales en diversas partes del occidente europeo y que pronto cobró fama por su astucia e iniciativa a la hora de combatir las herejías del momento, asi como por haber escrito un manual sobre métodos inquisitoriales que sirvió de guía a otros famosos inquisidores.Para los curiosos del personaje y para los amigos del "corta" y "pega" recomiendo el articulito de la Wikipedia que, sin ser demasiado extenso es bastante explicativo. Como curiosidad literaria, recuerdo que este personaje histórico aparece en el libro de Umberto Eco "El Nombre de la Rosa" así como en la pelicula del mismo nombre.
En su "Manual del Inquisidor" nos advierte Bernardo que no se puede usar un método único e infalible para vencer al Maligno, ya que hacer eso es darle ventaja a las fuerzas del Mal, las cuáles neutralizarían las estrategias y argucias del inquisidor. Dicho esto, el inquisidor deberá sacar provecho tanto de las respuestas de los acusados, como del testimonio de los acusadores y también y sobre todo de su propia experiencia.
La obra de Gui se centra sobretodo en desenmascarar a cinco tipos de sectas: la primera de ellas sería la de los "maniqueos" (fundada en la zona del actual Irán a finales del siglo III d.c por el sabio persa Mani) los cuáles tenían una creencia marcadamente dualista en la cuál el espíritu del hombre pertenece a Dios y el cuerpo al demonio estableciéndose una lucha constante entre ambos y la búsqueda final del triunfo del primero sobre el segundo. La segunda herejía nombrada por Gui es la de los "valdenses"(fundada a finales del siglo XII d.c en Lyon por un comerciante adinerado llamado Pedro Valdo)los cuáles practicaban un cristianismo primitivo basado en la venta de sus bienes e inicio de una vida de pobreza y comunión con el evangelio. El tercer grupo herético serían los "pseudoapóstoles" o "begardos" (grupo formado en torno a 1215 d.c en Alemania y cuya variante femenina sería llamada "beguinas") que llevaban una vida austera, viviendo con sencillez, recitando comunitariamente el oficio y rezando asiduamente, siendo sus pilares la piedad, la pobreza y la pureza. El cuarto grupo sería el de los judíos conversos que según Gui "retornan al vómito del judaísmo".El quinto y último grupo en el Manual de Bernardo Gui son toda la miríada de hechiceros, adivinos e invocadores de demonios "cuyas prácticas pestilentes perjudican mucho a la pureza de la fe".
He de añadir que cada uno de esos cinco grupos dan para mucho , sobre todo los tres primeros, los cuáles reunían unas características comunes de pobreza y vida cristiana primitiva pero se diferenciaban en su dogma y rituales. Añadir además que existían muchas más sectas en aquellos siglos medievales (y en anteriores y posteriores) y a ellas se debe la futura Reforma protestante en cualquiera de sus variantes.
Para estudiar estos temas relacionados con el cristianismo, la Iglesia y la Edad Media recomiendo encarecidamente cualquier libro de dos magníficos historiadores españoles especializados en estos temas como son Teófanes Egido y Emilio Mitre Fernández.
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Respondo gustoso a tu amable invitación y te felicito por este rinconcín con buena luz y acogedores sillones.Confesaré que hace ya demasiados años que hago como que estudio historia, con lo cual lo que pongas por aqí me interesará.
ResponderEliminarAhora algo habrá que decir de la entrada ¿no?. Con este breve quedan meridianos los intereses de la Iglesia y la Inquisición con respecto a las herejías: la primera preocupación tiene más que ver con lo que de atentado a el orden socieconómico establecido tienen estas desviaciones, esto es, socavar el dogma único desde una perspectiva, digamos que mundana.
Lo de quemar brujas y tal es una afición preferentemente protestante, aunque la leyenda negra siempre vende más y mejor.
Gracias por dejarte caer por aquí. Me honra tu visita. Como ves, mis pelis favoritas son aquellas que han pasado realmente a lo largo y ancho de este mundo.Ello no me quita el placer de leer y aprender de cine a través de Quimérico o de tí.
ResponderEliminarUna buena reflexión la de quemar brujas. No se exactamente que "corriente cristiana" quemaba más brujas o hechiceros. Si es cierto que se conocen y están más y mejor documentados los autos de fe católicos y que en ellos destacan figuras conocidas como el citado Bernardo Gui o como Torquemada entre otros. Rara vez alguien recuerda que el insigne médico y científico español Miguel Servet fué mandado quemar por Calvino.
Estupenda reseña, quiero más! Aunque bueno, será cuestión e indagar en esos libros que recomiendas. El único manual de Inquisidores que he leído es el de Nicolau Eimeric y pertenecía a una pequeña colección de libros de terror, con eso lo digo todo.
ResponderEliminarY he de confesar que gracias al artículo he descubierto de donde viene la palabra "maniqueo". Fíjate si ha sido provechoso...
Vaya, me alegra haber te iluminado un poco más el camino. Si el viejo Mani levantara la cabeza....
ResponderEliminarEimeric, Gui y Torquemada podia darse la mano por su magnífica diligencia en hacer su "trabajo". Lo de Vicente Ferrer es peor, aún no siendo inquisidor ayudó a algunos descarriados a llegar .....a la hoguera. Como premio le nombraron "santo". Por supuesto, sus hagiógrafos niegan su participación en cualquier hecho represor. Pero hay que pensar que al fin y al cabo no era más que un dominico de su tiempo.
En cuanto a la Inquisición, añadir que jamás mató a nadie. Has leído bien. Nunca mató a nadie. Tras sacar la confesión al reo y comunicarle su castigo era entregado al poder civil para que ejecutase la pena y asi nunca mancharse las manos de sangre.
pues yo tambien me acabo de enterar de donde viene la palabra maniqueo y me ha interesado la entrada. Es más, no me parece frivola esa teoria entre distintas pertenecias de cuerpo y alma a entidades antagonicas... Eso explica mi mala conciencia...... Prometo volver con frecuencia.
ResponderEliminarHombre Quikino, cuanto honor. Gracias por devolverme la visita a tu blog. Como ves, el mio es muy diferente al tuyo, pero ello no nos quita el disfrutar mutuamente de nuestros respectivos post.
ResponderEliminarVisitame cuanto quieras. Y en tu honor, voy a decir una cosa: viejo Mani...VESTE A CAGAR.
¿No combatió Bernanrdo Gui a los dulcinites?
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